Un nuevo reto.
Algo que no habíamos llegado a hacer, pero dicen que para todo hay una primera vez. Pues es la hora de hacer galletas!!
Recuerdo esa llamada de mi "cuñá" mientras yo estaba en el comedor del cole: ¿tú harías estas galletas?, a lo que respondí como muchas veces decimos por aquí "intonceees" jajaja. Otra chaladura más. Pero si las he hecho en el instituto en clase, las he practicado en casa para el examen, tuve la suerte de que me tocó hacerlas y lo bordé....¿por qué no iban a salir ahora? Eso está hecho ya!!
Un trabajo precioso de hacer, como todos, pero los que son para los más pequeños es que me encantan, aunque a la vez más sacrificado que las tartas. Mucho tiempo con la cabeza agachada entre hornear, decorar... pero mucha satisfacción al ver el resultado y al leer los mensajes que recibíamos de mi cuñada cada vez que le mandábamos un modelo de galleta. En total 45... que así quedaron.
Después de este bautizo, hace una semana llegó otro... También niño, los mismos modelos, pero distinta decoración. Y aunque ya habíamos hecho el bautizo anterior...nuevo reto!! Ahora son el doble de galletas!!! Nos preguntábamos...¿cuánto tiempo vamos a tardar con esto? pero, realmente..¿nos dará tiempo? Pues no se hable más, manos a la obra. Empezamos con las etiquetas, que quiera que no se lleva su tiempo y luego el resto... Nos pusimos una hora para empezar... más tarde de las 9 no o nos pilla el toro. A las 9 todo listo para empezar, y cuál fue nuestra sorpresa, si paramos a contar las horas que tardamos en estas y las de la otra vez, en esta hemos tardado bastante menos. A la hora de comer teníamos el trabajo súper adelantado. No sabemos si será porque era la segunda vez ya y teníamos algún truquillo cogido o porque verdaderamente creíamos que no nos iba a dar tiempo y nos metimos el turbo. Como fuera...lo terminamos cansados pero contentos. El resultado?? Este....
Una vez más pido perdón por la calidad de las fotos.
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